REFLEXIÓN Y ANÁLISIS
La reflexión y el análisis es una de las cosas a
las que los españoles ahora más que nunca debemos hacer. Sobre todo en temas
que conciernen a la política actual, es decir de hace unos dos años para aquí.
Me sorprende mucho el actual gobierno que gobierna
este país, un país desde siempre ingobernable, muchos cabezas pensantes se
fueron de él porque aquí nadie se ha entendido. Siempre ha habido un combate
entre tres bandos, sobre todo en el
anterior siglo y este que llevamos ya 13 años de siglo, estos tres han sido, la
derecha, la iglesia católica y la
izquierda. La una, la del medio siempre ha estado del sol que más calienta, es
decir ha hecho de bisagra entre las dos, pero al margen de todo ello, estos tres
bandos, cada uno, quizás uno menos que otros, siempre han propagado una
política de cómo se suele decir popularmente “barrer para su casa”, la
situación de preocuparse genuinamente por el ciudadano, de protegerlo, ha
quedado en segundo plano.
El ciudadano español vive totalmente desamparado
por tres lados, en la iglesia ha dejado de creer, porque ha visto en ella un
mal ejemplo del que no tiene ningún punto de referencia, el papa Francisco I
está intentando dar un giro al papel de la iglesia católica precisamente para
poder rescatar a esa gente que ha dejado de creer . Difícil tarea la suya,
sobre todo en este país, en el que se reconoce tan solo como víctimas
beatificadas a aquellas que fueron violentamente muertas de un solo bando, el
bando de los subversivos, llamados “nacionales” de una guerra cruel como lo fue la guerra civil
y que en realidad fue un golpe de estado al estado que había sido
democráticamente elegido.
El otro lado es la izquierda política, deslumbrada
por una política económica aplicando normas e ideas que se acoplan más a unas ideas
neo-liberales. La izquierda tampoco ha dado un buen ejemplo de transparencia
política a la ciudadanía, con escándalos de corrupción, cohecho y
prevaricación.
De otro lado nos queda la derecha, que en 2011, se
suponía iba a ser la salvadora del ciudadano. La que supuestamente levantaría a
este país de la crisis financiera que estaba atravesando y que en todo momento
culparon de la misma al anterior gobierno supuestamente socialista del señor
Zapatero. La culpa de todo lo que estaba ocurriendo en este país, la tenía el
señor Zapatero y la sigue teniendo. No obstante pienso que este actual gobierno
del señor Rajoy ha hecho bueno al anterior gobierno del señor Rodriguez
Zapatero, por muchas cosas que él no hizo y este actual está haciendo, y ¡cuántas
y cuantos que en su día pensaron que el rumbo de la nación iba a cambiar con
estos desalmados los votaron desgraciadamente! ¡Ah pero ahora, resulta que los
que acudieron a las urnas en mayo de 2011 nadie voto al PP! Es decir que este
país se ha convertido en un país de fantasmas, pues resulta que si nadie votó a
esta gente, lo hicieron seres etéreos o fantasmagóricos de ultra tumba.
La cuestión es que el ciudadano también ha perdido
la credibilidad en esta gente. Nos queda confiar en la Corona, pero también
esta mancillada, por otra parte en la justicia, pero es dudosa, pues aunque se
diga que es imparcial y es igual para todos, los hechos demuestran que no es
así. Los jueces pasan a ser reos y los reos pasan a ser los jueces.
El ciudadano se ha quedado huérfano de padre y
madre. Está en una trifurcación de la que no sabe cual vía escoger. Ha quedado
esquilmado con todos los “ajustes” por no decir recortes sociales que ha hecho
el actual gobierno. “Le voy a meter la tijera a todo, salvo a pensiones,
sanidad y educación.” Estas fueron
las palabras del señor Rajoy dos semanas antes de salir elegido su partido con
mayoría absoluta, batiendo todos los records de la historia democrática de este
país y batiendo el record de mentiras por parte de un gobierno que
lamentablemente fue elegido por más de 10 millones de personas. Hubo un
político que fue elegido
democráticamente y por culpa de él murieron más de 50 millones de habitantes.
En este país por todas las estrecheces que ha impuesto el actual gobierno,
también van a perecer lentamente ciudadanos que hasta incluso algunos de ellos
fueron sus votantes.
Me sorprende
que gente que supuestamente ha ido y va semanalmente a la iglesia no cumpla con
uno de los diez mandamientos: “NO MENTIRÁS”. Este país está sumergido en y por
la mentira. Mientras no amanezca con gente que esté capacitada para gobernar,
para legislar, seguirá siendo un país ingobernable. Un país en el que todos
entienden su idioma, pero con una gran confusión, porque cada cual hace lo que
se le supone va bien con sus intereses, el más débil seguirá siendo más débil y
habrá cada día más débiles. El pícaro, el vivo, el especulador seguirá siendo
más rico y habrá menos ricos, pero los que sean serán aún más ricos, sino lean
las estadísticas. ¿Cómo evitarlo? Solo con un deseo que se haga realidad,
pensemos más en los demás y menos en nosotros, pero ¡TODOS!
VEGUEROS S.M. REFLEXIÓN Y ANÁLISIS, "NO MENTIRÁS”