Ha pasado un año y medio desde que AVESAN ganara las
elecciones para gobernar el municipio de
la Vega de San
Mateo, como siempre y ya no es de extrañar en el programa de cada uno de los
que se presentaran a las elecciones hicieron promesas de las que supuestamente
durante los cuatro años de legislatura se realizarían. Los votantes que por desgracia
todo se lo creen, votaron a los que más les convenció, por las promesas que
esbozaban.
Es una falta de respeto que se prometan cosas para una
futura legislatura y no se cumplan, y ya
es hora que la ciudadanía empiece a ser más responsable a la hora de votar,
cualquier partido político tiene que empezar a medir a la hora de presentar un programa lo que en
realidad sí va a poder cumplir y lo que en realidad a pesar de que su
electorado se lo pida, no va a poder realizar.
Los vecinos de la
Vega de San Mateo empiezan a estar descontentos con su actual
alcalde y el resto de su grupo de gobierno; y es tal el descontento que incluso
algunos de ellos manifiestan su indignación a través de medios de comunicación
en emisoras que emiten desde Las Palmas.
Cuando se inicia tal descontento, se inicia un virus de descontento que contamina al resto del municipio. Es como un pequeño fuego en el bosque, que después no hay bombero que lo apague. Y si el actual grupo de gobierno se hace eco de lo que sucede debe poner algún cortafuego que impida que este descontento se propague, para ello es fácil, lo que debe hacer es escuchar y no precipitarse en tomar decisiones que a la larga va a hacer buenos a los que tantos años fueron los malos.
Cuando se inicia tal descontento, se inicia un virus de descontento que contamina al resto del municipio. Es como un pequeño fuego en el bosque, que después no hay bombero que lo apague. Y si el actual grupo de gobierno se hace eco de lo que sucede debe poner algún cortafuego que impida que este descontento se propague, para ello es fácil, lo que debe hacer es escuchar y no precipitarse en tomar decisiones que a la larga va a hacer buenos a los que tantos años fueron los malos.
Los vecinos del municipio echan en falta al anterior grupo
de gobierno, pues argumentan que el otro lo hacía mejor, pero no hay que
olvidar, que los otros estuvieron casi 16 años y estos llevan casi dos años.
¿Simplemente por eso ahora se les debe perdonar los errores que este actual grupo
de gobierno está cometiendo? ¡De ninguna manera!
¿Qué se puede hacer ante esta situación?
La experiencia nos debe enseñar a los ciudadanos a que los
que se salen de sus promesas electorales hay que decirles que no lo están
haciendo bien.
Los que gobernaron por 16 años no lo hicieron nunca bien,
pero la ciudadanía nunca les dijo que lo hicieran mal. La ciudadanía para decir
que las cosas no las hacía bien, manifestaba sus quejas mientras se tomaban
alguna copa en el bar, o mientras estaban comprando en el supermercado de enfrente de su casa o cuando se
encontraban con algún amigo o amiga en la calle. A eso se le llama cuchichear y
así nos ha ido a los españoles que llevamos 30 años de democracia cuchicheando
y los que gobiernan nos han toreado a todos como han querido, convirtiendo el
país en una partidocracia.
Ahora estamos en un momento en el que por desgracia nada
funciona y eso quiere decir que lo que ha durado por más de 30 años se ha
acabado. Es el momento que el pueblo sin violencia pero con firmeza no debe
esperar a que se cumplan los cuatro años de gobierno para castigar simplemente
con el voto al que en su día eligió. La calle es el lugar donde debe manifestar
solidariamente sus preocupaciones, sus demandas, sus peticiones, porque donde
se les debería escuchar no se les escucha, que es a través de la oposición que
también les representa en los plenos municipales. Una oposición en la Vega de San Mateo que está en
la inopia, claro está, ¿qué puede decirle a un grupo de gobierno, que a pesar
de ser inmaduro políticamente por el tiempo que lleva, ha puesto interés y
ganas por levantar un municipio que estaba prácticamente en la banca rota? Pero
no obstante tanto a uno como a otros de la oposición no se les ve un interés
altruista de poner las cartas sobre la mesa y cuando lo han hecho lo han hecho
buscando los tres pies al gato sin ningún fundamento serio, y como resultado de ello han perdido el
respeto de sus conciudadanos. Volvemos a lo mismo de siempre. Ahora, para el
2015 ¿deberá aparecer otro nuevo partido como el que surgió en 2011 para
retirar al actual AVESAN? ¿Este nuevo partido que supuestamente se postule,
¿qué deberá prometer para que los ciudadanos queden deslumbrados y les den sus
votos, una pista de aterrizaje de helicópteros urbanos, o una pista de nieve en
Montaña Cabreja para cuando supuestamente algún día nieve, o una fábrica de
chorizos con denominación de origen Vega de San Mateo?
Así como los partidos políticos deben ser serios, la
ciudadanía debe ser seria en saber escoger a sus gobernantes que son sus
servidores, que no para que se les rinda pleitesía por la que están
acostumbrados.
Los ciudadanos deben de una vez por todas no dejarse seducir
por los que gobiernan, que no son los ediles políticos, y que sí son algunos
empresarios que manejan el cotarro a su
gusto.
La culpa de la corrupción que hay en este país, mayormente
los culpables han sido los que han manejado las finanzas de la economía
empresarial, pues han sabido cómo comprar a los que nos han gobernado. Hay una
lista interminable de imputados de todos los partidos víctimas de esas ofertas
seductoras de empresas influyentes.
Estadísticamente está más que demostrado que los ciudadanos
cada día están perdiendo la confianza en los partidos que nos gobiernan, todo
porque evidentemente no se han puesto de parte de los que les han puesto para
gobernar, precisamente por sus falsas promesas.
Ahora ha llegado la hora de las plataformas ciudadanas sin
ningún tipo de denominación política. Los españoles comienzan a estar artos de
que partidos de distintas ideologías políticas les hayan prometido el oro y el
moro y a la hora de la verdad nada de lo que prometieron han llevado a cabo, es
más, incluso no solo no lo han llevado a cabo sino que incluso derechos
reconocidos algunos de ellos adquiridos
con derramamiento de sangre les han sido arrebatados.
Los ciudadanos deben ser exigentes con las promesas que
recibieron, si es preciso movilizándose pacíficamente en manifestar su
descontento en lo que ellos crean que no han sido satisfechos por lo que en su
día votaron.
Vivimos en un estado
de derecho y democrático y debemos hacer uso de todos los medios democráticos
para que se nos escuche, siempre de una forma pacífica a pesar de que algunos
medios del supuesto orden público supuestamente nos provoquen para actuar de
una forma violenta y por lo tanto ilícita e ilegal. La violencia no conduce a
ningún lugar. No es tiempo de suplicar, es tiempo de exigir lo que otros se
supone han prometido hacer y no lo han hecho. Y sin embrago han hecho lo que no
dijeron que fueran a hacer.
Sabemos que es difícil contentar a toda una población sea la
cantidad de población que sea. Solo hay que ver cuando se hace una reunión de
vecinos para tomar cualquier decisión y casi ninguno se pone de común acuerdo,
¡ha eso sí! Todos saben mandar, cada uno se vuelve un pequeño dictador y grita
haciendo valer su opinión. Y así es como siempre ha funcionado este país, que
cada uno ha pensado en sus propios intereses y no en el bien común de todos,
por eso este país está tan desestructurado en todas sus funciones
institucionales, porque cada uno ha ido a la suya y como se suele decir: “Salga
el sol por donde salga, mientras a mí no me toque”.
Este país durante más de treinta años ha carecido de una
verdadera democracia, hemos tenido una democracia heredada de una dictadura,
que para darle entrada a la misma sin que se provocara ninguna revolución se
tuvo que admitir una serie de inconvenientes, como lo fue que entrara la figura
del Rey, no escogido democráticamente sino puesto a la fuerza con calzador o lo
tomábamos o no había democracia con todo un sinfín de leyes que hasta incluso
algunas no cuadran con la constitución que votamos los españoles. Es decir la
democracia no entró con buen pie dado que las bases no eran auténticamente
democráticas, los resultados los estamos sufriendo hoy. Todo lo que no se
inicia con una buena base, desgraciadamente se desmorona, como se han ido
desmoronando desgraciadamente todas las instituciones del estado, un estado
enfermo y decadente. La justicia inoperante por ser demasiado lenta y
dependiente del poder político que gobierna temporalmente durante cuatro años
el estado del país, la monarquía tocada por todos los escándalos hasta ahora
acaecidos y que no hace falta mencionar porque todos sabemos cuáles son, y ya
no digamos a nivel general a excepción de algún partido político si lo hay, la
corrupción, que se ha ido infiltrando en el tuétano de cada uno de ellos,
expoliando al erario público de tal forma que nos ha dejado en pañales, por no decir
en cueros a esta país.
La ciudadanía debe decir ¡Basta ya! A los abusos.
Es hora de que tengamos un país democrático de verdad y para
eso es necesario quitarse de encima el miedo.
VEGUEROS S.M. "La ciudadanía debe decir ¡Basta ya! A los abusos".
VEGUEROS S.M. "La ciudadanía debe decir ¡Basta ya! A los abusos".