Ramón Mariscal i Parella

Ramón Mariscal i Parella
Escritor, Poeta y Presentador.-

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domingo, 26 de febrero de 2012

EL PATIO DE MI CASA ... NO ES PARTICULAR.-

EL PATIO DE MI CASA ... NO ES PARTICULAR  


Por: Ramón Mariscal i Parella
Escritor, poeta y presentador
Sea serio señor González. Esas son las palabras que en reiteradas ocasiones usa el actual alcalde del consistorio de la Vega de San Mateo dirigidas al que fue alcalde durante los dos últimos años de la legislatura de los años 2004-2008 y de la legislatura completa de los años 2008-2012, don Gregorio González.
Y es que este personaje político, tiene mucho que desear como político de un grupo en la oposición.
En este artículo voy a centrarme no en contar lo que se dijo o no se dijo en este último pleno celebrado el jueves día 23 de febrero  a las 19.00, sino más bien en las formas, que usa el portavoz de AxSM.
Debo subrayar en lo que se refiere a Gregorio González su prepotencia y arrogancia, sobre todo cuando al final del pleno en ruegos y preguntas inicia una cansada lista, no de ruegos, no de preguntas, sino más bien su comportamiento parece la de un jefe de empresa en una reunión de subordinados a los que les está pidiendo explicaciones por todas las decisiones que han tomado los mismos. Debo recordar que es una sesión no de pedir explicaciones, como parece ser en la forma que se expresa y se dirige a cada uno de ellos, los concejales del grupo de gobierno. Este señor no está capacitado para pedirlas, primero porque bajo su mandato como alcalde, jamás consintió que nadie se le subiera a la barba en los plenos, jamás se le vio indicios de ser un demócrata convencido, por lo tanto ahora no puede ni debe presumir de que los demás lo sean con él y sin embargo el actual alcalde, con mucha paciencia le deja que se exprese, no obstante el presidente, como lo es el alcalde, en mi opinión, debería ser menos condescendiente y ser más estricto en aplicar un protocolo en los ruegos y preguntas que permitan al que las hace no extenderse como el que está haciendo una ponencia universitaria. Segundo, el Sr. González no tiene ninguna autoridad para pedir explicaciones de lo que hacen o no hacen los actuales concejales del grupo de gobierno, tan solo él debe limitarse a hacer ruegos y preguntas no en un  tono de mando sino en un tono educado y ético como corresponde al portavoz de la oposición. Por otro lado a quienes corresponda contestar a las preguntas que formule el portavoz, no tienen la obligación de contestarlas en ese mismo instante en el que se formulan las mismas y parece ser que los concejales del grupo de gobierno se achican y creen que en ese mismo instante deban ser contestadas. Aún recuerdo en anteriores plenos durante el reinado dictatorial de Alternativa por San Mateo, que cuando el portavoz de la oposición, don Serafín Hernández formulaba alguna pregunta o algún ruego, el Sr. González, primero lo ridiculizaba y después le contestaba que ya se le contestaría sobre la cuestión que el presentaba. Nunca o casi nunca se contestaban las mismas. Como decía Don José  Hernández “no sabe, no contesta”.
Y ahora el Sr. González pretende en un tono exigente que todo lo que pregunta en ese mismo instante le sea contestado. En este último pleno intentó ridiculizar a un joven concejal, tras unas supuestas declaraciones. (Que no hizo)
La sensación que provoca con esa actitud, es que este señor viene a poner firmes a un grupo de gobierno joven políticamente, pero no tonto. Con dicho tono, da la sensación que estando fuera del poder, quiera imponer su voluntad de cómo se debe gobernar el municipio.
Sr. González usted tuvo tiempo de demostrar cómo se gobierna un municipio por más de seis años, y lamentablemente no ha demostrado tener esa valía, el arroz se le paso y no puede ni debe, no está capacitado, para dar órdenes. Limítese tan solo a esparcir mierda si quiere por el pueblo, a ir a “su emisora” a insultar a todos los que no comulgan con usted, a llamar alcahuetes a todos o a según quienes van a los plenos, a llamar satélites a los que se toman un interés genuino por su pueblo. Que por cierto, usted sí que tenía esos satélites, danzando por las esquinas del pueblo y cuando cualquier transeúnte iba paseando, según qué cosas no se podían decir muy alto, porque al momento usted ya tenía el parte en su mesa.
Ahora, dicen los vecinos vegueros, sí se puede ir tranquilo por el pueblo, hablando lo que quiera cada uno. Ahora se ven corros y corrillos de gente hablando sin temor a pensar que se puedan tomar represalias, por lo visto, las había antes.
Lo más positivo de este actual nuevo grupo de gobierno, es que ha entrado un aire fresco, un aire que necesitaba esta vega y es evidente que se respira un aire nuevo y eso es lo que fastidia a un grupo de gobierno que lo fue y no supo dar con la receta perfecta o no quiso aplicar la receta que se merecía este municipio.
El burro rebuzna, las personas que lo son no rebuznan 
Este pueblo ha perdido el miedo a esos que lo infundieron, supuestamente porque se supone aplicarían medidas severas en contra de aquellos que no comulgaran con sus convicciones.
El miedo simbólicamente se ha perdido y es un referente cuando al cerrarse el pleno del día 23 de febrero, uno de los administradores de esta página, don Jesús Padilla, delante de una asistencia de 24 ciudadanos, pidió permiso al alcalde para formular una queja. La misma consistía en que un miembro de la corporación municipal, concejal en la oposición, había manifestado un insulto públicamente desde una emisora de radio a algunos asistentes a los plenos llamándolos alcahuetes y que consideraba una falta de respeto a los mismos. Pedía unas disculpas públicas a la vez que la misma queja iba a ser enviada al “Defensor del Pueblo” don Jerónimo Saavedra. Simultáneamente a la formulación de la queja, el concejal en cuestión, salió como alma que lleva el diablo, cabizbajo con todo su grupo de la oposición, tratando de evadirse ante el comportamiento valeroso de don Jesús y la cobardía del que había propinado tales insultos.
Las cosas a la cara, con la verdad se va a cualquier lugar y eso es lo que cualquier ciudadano está en su derecho y deber a expresar lo que piense, eso sí, sin insultar, siempre comedido en sus planteamientos. El burro rebuzna, las personas que lo son no rebuznan, conversan y dialogan y es que algunos creen que el salón de los plenos SON EL PATIO DE SU CASA.
VEGUEROS S.M. Con la verdad por delante.